Alemania acogerá la principal reunión financiera de su presidencia del Grupo de las Siete potencias económicas del 18 al 20 de mayo, informó el miércoles el periódico Rheinische Post.
“Este año, los desafíos son particularmente grandes. Estamos viendo inflación y un aumento de la deuda”, dijo el ministro de Finanzas, Christian Lindner, al periódico.
“Los países del G7 tienen un papel especial como anclas de estabilidad”, agregó. “A nivel nacional e internacional, debemos prestar atención a las finanzas públicas sostenibles”.
Los ministros de finanzas y los banqueros centrales de las naciones del G7 (Estados Unidos, Japón, Alemania, Francia, Gran Bretaña, Italia y Canadá) se unirían a la reunión en Koenigswinter, cerca de Bonn.
También se esperaba al presidente del Banco Central Europeo y funcionarios de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), según el diario.
Lindner dijo que la estabilidad fiscal era esencial para fomentar la inversión y la innovación.
“Esta es la única forma en que podemos salir de la crisis en todo el mundo y dominar las tareas futuras en la protección del clima y la digitalización”, agregó.